Para este proyecto utilicé carriles de movimiento que guian el efecto de inflado de uno de los patrones que más me gustan: Voronoi.
Voronoi es un concepto matemático que se encuentra en la naturaleza, en fenómenos como la distribución de las células en las hojas, las manchas de la piel de algunos animales o incluso en la formación de cristales. Consiste en dividir un espacio en regiones basadas en proximidad a un punto central creando así muchas de las formas que vemos cotidianamente. Fue un ejercicio corto pero gratificante.
Operaciones sencillas pero efectivas, y el hecho de sumarle sonido le dio un plus inmersivo que me encantó.