Para comenzar, debo decir que tuve la oportunidad de pintar un mural para el bicentenario del Perú, el cual se encuentra ubicado en Miraflores. Este mural representa la pureza y ternura de un niño, con facciones alegres y amigables. En el fondo del mural, se pueden apreciar dos colibríes, rodeados de naturaleza y flores similares a las de la provincia de  Ayacucho. La elección del niño como figura principal del mural se debe a que representa la inocencia y la esperanza en el futuro del país. Los colibríes, por su parte, son una representación de la libertad y la belleza natural del Perú.

En cuanto a las flores que aparecen en el mural, estas son similares a las que se pueden encontrar en Ayacucho, una región del país conocida por su rica flora y fauna. La inclusión de estas flores busca resaltar la diversidad natural del Perú y su importancia en la cultura y el patrimonio del país.

El mural que pinté para el bicentenario del Perú representa la pureza y ternura de un niño, rodeado de la belleza natural del país. Con esta obra, busqué destacar la importancia de preservar y valorar la cultura , siempre rodeado de nuestra hermosa naturaleza